sábado, 1 de noviembre de 2014

Nunca volvió...

Todas las tardes espere que sus pisadas se escucharan en mi puerta de nuevo. 
Malditas horas en las que me torturaba la realidad. 
Estúpido calendario que me recuerda el olvido y a indiferencia. 

Ella sin saber qué pasa, duerme frágil. 
Tiene esa serenidad que a ti y a mi nos faltan. 

¿Será que tu venganza tiene nombre? 
Espero una maldita señal que me diga que alguna vez te cruzamos por el pensamiento. 

Vivimos tan poco para odiarnos,
soñamos demasiado para amarnos, 
Pensamos lo que no debemos pensar y derrotamos a los sentimientos. 

¿Cómo vives ahora? 
Esa maldita pregunta que no se aleja de mi pensamiento. 

No confió en ti pero no se porque diablos tu recuerdo me suplica
que no te olvide, 

No volvió, no regreso, 
Dime que has encontrado en tu camino, 
dime que el amor te atrapo. 

Si volteas no te convertirás en una estatua de sal,
Que te impide voltear, 
Si volteas solo veras un ser tan dulce 
que espera ver tu mirada por primera vez.